Cinco consejos para ahorrar con el aire acondicionado en invierno

Llegan los meses más fríos y queremos estar calentitos en casa. Pero la factura de la luz nos asusta tanto que nos lo pensamos dos veces antes de encender el aire acondicionado. ¿Hay que renunciar a la comodidad? Lo cierto es que no, simplemente, debes tener en cuenta algunos consejos importantes.

Un usuario sube la temperatura del aire acondicionado utilizando el mando a distancia

Ahorra sin pasar frío

No olvides que, hoy en día, los aparatos de aire acondicionado son muy eficientes y que su consumo energético es más que aceptable. Por eso, el primer consejo es que, si el sistema de climatización que tienes en casa es muy antiguo, te plantees la posibilidad de cambiarlo por otro más moderno. Sí, es una inversión importante, pero la amortizarás en menos de lo que imaginas.

Y si los aparatos de aire acondicionado que tienes en casa son nuevos, no pienses que está todo hecho. ¿Cómo puedes ahorrar? Presta mucha atención a los consejos que te vamos a ofrecer y no dudes en ponerlos en práctica ¡ya! El resultado lo notarás en la próxima factura de electricidad.

  1. Controla la temperatura: se trata de estar cómodo y caliente, ¿pero es necesario estar en casa en tirantes? Lo cierto es que no. Lo recomendable es que la temperatura diurna se sitúe entre los 20 y los 22 grados. Piensa que por cada grado que la aumentes, el consumo se elevará entre un 7 y un 8%. Si no quieres apagarlo por la noche, programar una temperatura de 18 grados será suficiente.
  2. Ajusta el funcionamiento del aire acondicionado a tus horarios: si pasas mucho tiempo fuera de casa, lo mejor es que lo programes para que entre en funcionamiento una hora antes de que llegues, así, cuando abras la puerta, tu casa ya estará calentita. También puedes apagarlo un rato antes de acostarte y programarlo para que empiece a funcionar un poco antes de que te levantes, de modo que lo harás con la casa ya caldeada.
  3. Orienta la dirección del aire: seguro que lo sabes, pero no está de más recordar que el aire caliente tiende a subir. Esto significa que es importante que las aletas estén graduadas para que el aire se dirija hacia abajo. Eso evitará que sientas frío y tengas la tentación de subir la temperatura.
  4. Evita que el calor se escape: de poco servirá que tu equipo sea muy eficiente si el calor se va por las puertas y las ventanas. Comprueba que cierran perfectamente y, si no es así, pon burletes que eviten esas pequeñas corrientes de aire. Una casa bien aislada y un buen equipo de climatización harán que el consumo sea sensiblemente inferior.
  5. No te olvides del mantenimiento: un aparato bien cuidado es un aparato eficiente. No importa que lo tengas desde hace poco, es importante limpiar los filtros de forma periódica. Mucho mejor si confías en un profesional para que se encargue de realizar las revisiones y cambios necesarios. El aire acondicionado no solo funcionará mejor y gastará menos, también tendrá una vida útil mucho más larga.

Ya lo has visto, puedes estar en casa calentito sin que la factura de la electricidad te quite el sueño. Sigue estos consejos, te podrás olvidar de las temperaturas invernales y hasta de tu bolsillo.

Fuente: habitissimo